Mascherano: "Es una tortura"

El emblema de esta Selección, Javier Mascherano, se mostró muy dolido por la derrota y fue muy duro con sus sentimientos en este momento. “No es tiempo de analizar el futuro”, agregó.

No lo puede creer. Mascherano, el emblema de la Selección, otra vez con las manos vacías. (Foto Télam)

4 de Julio de 2015 22:35

Por Redacción 0223

PARA 0223

Es el capitán sin cinta. El futbolero argentino medio, más allá de lo que genera Messi con su magia y su fútbol, se identifica con el “14”. Javier Mascherano, discutido en la previa de Brasil 2015 y adorado a partir de ahí, por reacciones, actitudes o frases, es el líder indiscutido de la Selección Nacional y no pudo ocultar el dolor por la derrota por penales ante Chile y una nueva oportunidad desaprovechada para quedar para siempre en la historia con un título de mayores. “Jugué tres finales y perdí las tres, quizá sea yo”, señaló con exagerada autocrítica.
 
“Una tortura”. Así describió el jugador del Barcelona lo que significó otra decepción en una final, como hace un año atrás en el Mundial. "No encuentro explicación para describir este momento. Es lo que toca. Hay que tragar saliva. Seré yo, quizás sea yo. Jugué tres finales (2004, 2007 y 2015) y perdí las tres. Ojalá que en el futuro el fútbol argentino pueda ganar. Esto es un karma, es una tortura", afirmó Mascherano, con mucha tristeza y resignación, a la salida del vestuario.
 
Además, quien lleva la voz cantante en el vestuario argentino, no se escondió y aseguró que "veníamos de un golpe muy duro hace casi un año cuando perdimos la final del Mundial de Brasil y ahora esto. Pero estamos acá para poner la cara. El fútbol es así”.
 
Por más que le preguntaban los motivos de por qué estos jugadores, de presente brillante en sus clubes no consiguen títulos con la camiseta nacional, no encontraba la respuesta: "Quiero disfrutar con esta camiseta como nadie, pero me toca sufrir. No le encuentro explicación. Hicimos una buena Copa América, con buenos y malos momentos. En la final estuvimos a la altura de las circunstancias, pero otra vez nos faltó la cuota de suerte que tenés que tener en la final", opinó.
 
Ante otra frustración y teniendo en cuenta que todo lo que viene parece chico, al lado de los dos objetivos recientes, Mascherano no quiso dejar títulos y fue cauteloso en sus palabras. "Hoy todo queda muy lejos, soy de las más grandes, habrá que hacerse cargo de lo que venga. Pero lo que más lamento es no haberle dado ninguna alegría a la gente. No creo que sea momento de analizar el futuro, ni pensar en lo que viene”, finalizó.